En los últimos años la industria de la belleza ha crecido exponencialmente debido al acceso al internet, la información que existe sobre la industria y a las inquietudes de las nuevas generaciones. Ahora, las personas exigen una piel saludable y la prevención se ha vuelto un gran motor para el crecimiento de las compras hablando de los productos para el cuidado de la piel.
El skincare ha dejado de ser exclusivo de las marcas que se han dedicado a desarrollar productos únicamente para el cuidado de la piel. En este momento, las marcas de maquillaje han encontrado una oportunidad para expandir sus portafolios de productos en un intento de satisfacer las necesidades de mujeres y hombres. Todo con el fin de retenerlos ofreciendo también alternativas para preservar la belleza y salud de su piel.
Más que cuidado de la piel, un estilo de vida que hay que comprender
Más que tratarse de tener una piel bella, el skincare forma parte ya de llevar una vida saludable. Es un estilo de vida que incluye prevención y cuidado personal. Se ha convertido en una pieza del rompecabezas del bienestar y la belleza. Esto lleva a un consumo mejor pensado, más consciente y con propósito.
La transparencia, la simplicidad, lo natural, lo seguro, unos pocos ingredientes y los remedios tradicionales forman parte de este estilo de vida en pro de la salud de la piel. Lucir y estar saludable es entonces un nuevo signo de riqueza y con éste viene una autoexpresión enfocada a la salud, experiencias, servicios y productos que ayudan a alcanzar las metas relacionadas al bienestar.
El skincare: una tendencia que domina la narrativa
“Tu piel lucirá bella y saludable” se ha convertido en el mensaje central de las marcas. Ahora, mejorar la forma en que se percibe la piel o el cómo se siente, lograr una piel que luzca limpia y saludable se convierte en una prioridad para las nuevas generaciones. La belleza, ha evolucionado junto a las personas y se percibe de una manera distinta, con visiones que van más allá de mantener un look o simplemente lucir bien, evolucionando a un tema de bienestar 360.
Ahora que lo sabes, el reto es entonces conocer a las personas que tienen esta visión de la belleza y comunicar este sentido de bienestar con la profundidad, nivel y entendimiento de importancia que ellas le dan.
La pregunta es entonces…¿tu marca aporta a esta nueva visión y propósito que hoy tienen las nuevas generaciones? Tal vez sea momento de pensar desde su piel.